Un amanecer después de muchos años

Ayer por la mañana me di cuenta que hacia muchos años que no me detenía ni un instante a ver un amanecer es por eso que me levante muy temprano a esperar el primer rayo de sol. Cual sería mi sorpresa que fue eso efectivamente, sólo un rayo de sol ya que cuando por fin salió el cielo se volvió gris y no me permitió mostrarse ante mi en todo el día.

Fue entonces cuando reflexione por que el hombre siente tanta ilusión al ver un amanecer, de estas cavilaciones nació lo siguiente:

En las antiguas culturas el amanecer significaba un nuevo comienzo a pesar del tiempo esto sigue arraigado en lo mas profundo de nuestra alma, haciendo que cuando nuestra vista choca con esta imagen nos haga recordar que podrán venir nuevos tiempo.

Una simple mirada a este perfecto fenómeno hace que mi corazón lata y todas las turbulencias de mi alma se calmen como se calma un niño al ser satisfecha su hambre, un nuevo amanecer, un nuevo día para emprender todo lo que se ha propuesto por la noche.

Sólo un amanecer en la punta del cielo, sólo una amanecer cerca de mi corazón da esperanza y me hace olvidar lo sufrido, lo amargo, lo vivido, puedo recordar la calidez que alguna vez cuando era niña sentía, mis ojos se maravillan a cada evento de la vida sintiéndome feliz por esta oportunidad; sin embargo...

Un amanecer dice tanto y a la vez calla tanto, dice que algo nuevo vendrá que hay esperanza para este mundo envuelto en tantos conflictos, desolación y tristeza; pero a la vez calla todo el dolor de aquellos que un nuevo día significa un día mas de agonía por amor, hambre, enfermedad, guerra o soledad.

Un fenómeno que mezcla esperanza y agonía, jugando con la emociones de aquellos que se detienen a verlo cada día, cada uno con un pensamiento, una idea, una religión una vida diferente pero en el fondo el mismo sentimiento deseos de que eso signifique buena suerte, para terminar con el dolor, el sufrimiento, recuerdos y lamentos; alcanzando al fin el éxito la vida perfecta, el amor imposible, la satisfacción de sentirnos completos, felices, libres, la derrota a la muerte para poder al día siguiente encontrar un nuevo AMANECER.